Como viene siendo habitual y prácticamente una norma de la casa, Fairlight Jarre os adjunta una reseña del próximo disco de Jean-Michel Jarre, GEOMETRY OF LOVE.
En esta ocasión le ha tocado a Víctor Maqueda (más conocido como ZZERO), que nos destripa el disco tema a tema, y además nos ofrece su visión personal del trabajo. Debéis recordar, que como él mismo dice, esta es su opinión, y en ningún caso debe estar por encima de cualquiera de los miembros o visitantes de la comunidad Fairlight Jarre.
Muy flaco favor se hace JARRE comercializando en este preciso momento un trabajo como «Geometry Of Love». En primer lugar esta composición debería haber quedado relegada para lo que se concibió inicialmente: música para un club parisino exclusivo y glamuroso. Se guardó de publicar la música creada para la firma Bang & Olufsen, incluso de utilizar lo jingles creados junto a Rimbert para la cadena Match Tv en próximos trabajos, lo cual ha dado más valor a dichas composiciones al convertirlas en rarezas. Sin embargo no ha querido actuar de igual forma con «GoL», que se prevé será un fiasco comercial.
Por otro lado la cercanía en el tiempo con «Sessions 2000» no hace sino que pensemos, en parte con cierto temor, que esta es la nueva línea musical que ha escogido.
Finalmente estrenarse con un disco de este estilo en su nuevo sello discográfico, el gigante Warner, es poco menos que un acto de inconsciencia que le costará caro; máxime cuando a dos meses de la fecha prevista para el lanzamiento de «GoL» se podian encontrar copias de coleccionista de este disco que han propiciado (y de qué manera) que abunden mp3 en la red, lo que no augura demasiado éxito de ventas al nuevo trabajo de JARRE. El caso es que la criatura ya ha salido del cascarón siendo sietemesino.
Todo ésto no hace más que ponerselo más difícil a un disco que desde la primera escucha sabemos que no es el disco que la mayor parte de los seguidores de JARRE esperaban, a pesar de guardar cierta correspondencia con sus predecesores «Metamorphoses» y «Sessions 2000». En «GoL» abundan ritmos repetitívos sobre los que pocas veces bailan melodías brillantes, y donde la improvisación parece haber tenido tanto protagonismo como el uso del piano. Y es ese uno de los elementos de más presencia en «GoL»: un piano cuyas notas navegan a la deriva como en un nuevo «Waiting For Cousteau» a punto de hundirse. También destacan en esta grabación el abuso de loops eternos que alargan algunos temas hasta el límite de lo permisible, invitando a una buena siesta o al aburrimiento más tedioso, del que solo nos rescatarían los sampleados de voces dispersos por todo el disco y algunas escuetas referencias a anteriores trabajos de JARRE.
Quizás lo más acertado sea repasar «GoL» tema a tema, para no caer en el error de condenar algunas piezas bastante interesantes que a pesar de todo flotan sobre este océano chilloutesco:
-«Pleasure Principle» (6’16»). Indiscutiblemente el corte con más identidad de todo el disco. Si llegara a extraerse un single de «GoL», cosa que no llegará ocurrir, sería éste. Violines sacados de una partitura de música de camara flotan junto a sampleados de voces en una atmósfera acuática.
-«Geometry Of Love, Part 1» (3’51»). Podría encajar tan bien en el «Metamorphoses» que sería fácil pensar que fue uno de los temas que se quedaron fuera del tracklist de dicho disco. Posiblemente habría resultado más simpático si la voz principal hubiera sido interpretada con un theremin. Irritante y prescindible donde solo se agradece su brevedad.
-«Soul Intrusion» (4’45»). Un comienzo que recuerda vagamente al «Music For Supermarkets 8» es lo único destacable de un tema que no aporta nada y donde el piano disfruta del libre albedrío.
-«Electric Flesh» (6’02»). Una de las joyitas por las que vale la pena hacerse con una copia original de «GoL». Una intro muy a lo «Chronologie» y una producción brillante para un tema que pese a su duración no cae en la repetición comodona gracias a los cambios de ritmos y ambientes.
-«Skin Paradox» (6’17»). Siempre socorrido por sus «obras menores» JARRE recurre a uno de los interludios creados para la gira Europe In Concert y titulado «Qu-est Que Lámour?». Nuevamente pianos que nos distraen de un fondo musical electrónico que no está mal del todo, pero que no acaba de convencer.
-«Velvet Road» (5’54»). Si hace unos años fue Pierre Palmade quien rescató «My Name Is Arthur» del repertorio de The Vizitors ahora es JARRE quien convierte «Children Of Space» en su particular «Camino de Terciopelo», ignoramos si con el beneplácito de Komuro.
-«Near Djaina» (5’01»). Tema que a pesar de su simplicidad y sus omnipresentes pianos (que aquí alcanzan la más lamentable interpretación) transpira una gran melancolía y hasta sensualidad, aunque a ésto último ayuda el que esté compuesto por JARRE en honor de su actual pareja. Podría haber entrado en el tracklist de «Sessions 2000» para cerrarlo de forma redonda.
-«Geometry Of Love Part 2» (4’06»). Más de lo mismo. Algo así como la versión remix de «GoL Part 1». Con unos samples de voz que palidecen a la sombra de los creados para «Zoolook».
En definitiva «GoL» no está llamado a ser uno de los grandes trabajos de JARRE, quien parece que no logra diferenciar entre lo que debería ser música para escuchar en su casa y la que merece alcanzar a un público mayoritario y espectante. Sería una pena que el estreno en Warner no tuviera unos índices de ventas golosos para la nueva discográfica, pero se supone que JARRE sabe lo que se hace lanzando comercialmente este «proyecto musical». Penoso sería también que temas como «Pleasure Principle» y «Electric Flesh» corran la misma suerte que el resto del repertorio por el simple y casual hecho de ir incluidas en el mismo disco. Pero no se puede esperar una respuesta benévola por parte de un público paciente que se cansa de esperar el disco prometido que nunca acaba de llegar y en cuyas filas ya acusa muchas bajas debido al exceso de experimentación.