Cuando fuí a Paris a ver el concierto en el teatro Marigny, visité los tres templos jarreros, la Concorde, los campos de Marte y La Defense. Me quedé observando desde la explanada el impresionante skyline con "Le Grande Arche" como principal protagonista y superponiendo las imágenes del concierto que tenía en mi mente con el espectáculo arquitéctonico que tenía ante mi. El concierto de La Defense es de lo mas grande que ha hecho Jarre, y aunque conciertos emblemáticos como el de Houston, The Twelve Dreams o Docklands no se le quedan atrás, normalmente es el que suelo poner en mi casa a gente que no conoce el trabajo de Jarre como ejemplo de lo que es capaz de hacer. Aunque he asistido a conciertos como Sevilla, Aalborg o Gdansk, no han sido lo mismo y esperemos que algún día nos vuelva a deleitar con otra de sus grandes puestas en escena.