Yo creo que el debate es bueno, o así debería ser. Y desde luego todas las opiniones, unas y otras, son respetables y legítimas. El problema con una obra, ya sea un disco, un libro, una pintura es que una vez que se hace pública, el autor de la obra ha de asumir que va a estar sometida a opiniones, debates, pareceres y demás. Muchas veces el que escucha, ve o lee la obra no escucha o lee lo que le hubiera gustado leer o escuchar y eso es muy legítimo. El caso es que la obra esta ya hecha, y se supone que el autor la hizo en ese momento a su gusto, que no tiene por qué coincidir con el de los demás. Y cabe que el autor, con el tiempo, hubiera hecho las cosas de distinta manera. Fijaros lo que le pasó a Josmar con Téo & Téa. Y también está otra cosa, que algunas veces se analiza tanto la obra que yo creo que acabas no disfrutando de ella. Es lo que le dije al querido Synthetic Man en el grupo de WhatsApp, que ya le llegué a decir que estaba deseando que acabara el libro porque me sentía diseccionado, y consideraba que no estaba disfrutando de la lectura. Pero él lo hacía, primero porque él es así, y segundo, con el noble fin de hacerme sugerencias y todas ellas buenas, y tan correctamente hechas que el agobio de un principio se convirtió en agradecimiento.
El caso, yo creo que todos aquí, pero todos, valoran el esfuerzo hecho, a pesar de que pueda gustar más o menos la obra, o lo hubiera escrito de una u otra forma. Y todo debate y análisis, siempre y cuando sea respetuoso, es bueno, aunque es cierto que a veces el debate no tiene ya muchas más vueltas y se convierte en un bucle de difícil salida.