Cita de: CitizenErased en 23 de Marzo de 2006, 10:55:30 PM
Hay una cosa que me ha llamado bastante la atención, porque lo he escuchado bastantes veces entre ayer y hoy, y creo que va a ser un problema. Más de uno, dos y tres periodistas/polÃÂticos/pensadores/menos pensadores/nada pensadores han empezado a plantear que, una vez se termine con ETA todavÃÂa no "estaremos a salvo" porque no se habrá acabado con el nacionalismo. E aquÃÂ: Ã,¿cual es problema? Ã,¿Los fines o las formas? Desde luego, si escuchamos al PP ambos. Pero eso de idea de cual es la idea del PP sobre la democracia. Frases del tipo "en el Pais Vasco lleva gobernando el mismo partido nosecuantos años y hay que acabar con eso"... dan bastante miedo, sobre todo porque me imagino que esa misma persona no exigirÃÂa un cambio de gobierno en AndalucÃÂa. En fin, pues eso: si se supone que en democracia caben todas las ideas Ã,¿donde encajan estas reacciones? Tristemente creo que a mucha gente les da mucho más "miedo" el nacionalismo que otras cosas. Más aún: dirÃÂa que el terrorismo es una perfecta justificación para combartir, de paso, el nacionalismo.
Hace unos dÃÂas tuve una interesante conversación con un colega de profesión del PaÃÂs Vasco que vino al instituto de Zaragoza en el que trabajo y sin haber aparecido aún el comunicado de ETA argumentaba casi calcadamente lo que tú has dicho en tu post.
Ciertamente el PP lleva unos cuantos años metiendo miedo a la población y encima lo hace de la peor forma que existe, es decir manipulando, tergiversando y aprovechandose de la ingenuidad y la ignorancia del pueblo llano. Términos como nacionalismo, independencia, autodeterminación, etc. eran palabras inocuas en el lenguaje de la calle, todo el mundo conocÃÂa la voluntad independiente de territorios como Euskadi o Cataluña y no pasaba nada, eran meras opciones ideologicas a las que la gente de a pie podÃÂa o no subirse y sobre las que se opinaba con mayor o menor criterio pero sin que la sangre llegara al rÃÂo. De la noche a la mañana estas palabras han pasado a ser letales y las opiniones que se vierten sobre ellas van acompañadas mayoritariamente de mensajes de odio y aversión. Incluso se ha llegado a temer a la palabra república mezclándola con los términos nacionalistas creando una confusión popular sin precedentes. Rajoy y sus secuaces conocen perfectamente la historia de Cataluña y Euskadi, saben a la perfección cuales han sido las causas que los llevaron a constituirse irremisiblemente en regiones españolas y son conscientes de la voluntad de una gran parte de los ciudadanos de ambos pueblos, pero eso es algo que no pueden evidenciar en sus discursos porque les desmontarÃÂa el garito. Prefieren confundir al pueblo español contándoles patochadas y lanzando estupideces como lo de que una nación no puede constituirse dentro de otra, asàmantienen entretenido al pueblo intentando evitar que piensen por si mismos.
El PP es actualmente la mayor lacra de España, un partido anclado en un anacronismo que lo sitúa a años luz de las derechas europeas y cuyo máximo fin es el de seguir guardando el casposo espÃÂritu de la España una-grande-y-libre bajo un disfraz de buen rollo democrático que logra engatusar al más pintado. Lo más grave es que su juego es el más fácil de usar y eso provoca que tengan el camino más llano a cada dÃÂa que pasa para poder pisar por donde les venga en gana.
Ojala este alto el fuego de ETA sea real y constituya el comienzo de muchas cosas, ojala dentro de un tiempo veamos todo esto como una etapa superada y hayan ocurrido suficientes cosas en España como para debatir sobre el nacionalismo vasco y catalán con el criterio y el sentido común que merece. Ojala algún dia haya suficiente madurez y se haya crecido lo necesario como para no temer a las palabras República Federal y se plantee esta opción como una alternativa legÃÂtima a las soluciones nacional-independentistas que los territorios históricos del estado español se emperran en considerar como únicas, algo que le va de maravilla al PP para continuar lavando la cabeza a la gente con manipulaciones y para seguir ahondando en esa zanja de odio que perpetúa el distanciamiento entre pueblos.