Estos son unos discos que miran al pasado, claramente, y al presente, pero muy poco al futuro.
Lo único, las declaraciones de Jarre sobre un tema como Falling Down, pero este es un tema menor, y no especialmente novedoso.
Jarre no ha querido explorar ni plantear cosas nuevas, sino colaborar. Un disco variado, a partir de los artistas de hoy y los del pasado.
Si Jarre se entusiasmará a partir de aquí para hacer cosas suyas que incorporen novedades... como ocurrió con Zoolook, está por ver.
Eso sí, en 1984 había mucho camino por explorar, y hoy es difícil ser original y fresco, llamar la atención con algo nuevo... ha llovido mucho.