Hola, josmareros. Aquí está la segunda parte del capítulo "Los daños maravillosos", perteneciente al Fanfic "El teclado del tiempo":
Karenina y Jean Michel habían sido llevados a una ciudad llamada Navojoa, localizada al sur de la provincia mexicana de Sonora, exactamente en la escuela preparatoria donde estudiaba Elmer: el CONALEP* Navojoa. Entraron a la cafetería de esa escuela, pero no se atrevieron a pedir nada porque alterarían el curso de la historia. Observaron a Elmer comiendo pan con mermelada y tomando café americano. Pero, al terminar sus alimentos, él se fue a una esquina de la cafetería y empezó a hacerse cortes en los brazos con una navaja de afeitar, mientras ponía cara de felicidad. "¡Sí, esto me encanta!", se dijo Elmer a sí mismo. Y mientras él se hacía heridas por gusto, Karenina le dijo a Jean Michel:
-Oye Jean Michel, eso que Elmer está haciendo es muy peligroso. Podría morir demasiado pronto si sigue con eso.
-Tienes razón, Karenina. Sigámoslo sin que se dé cuenta, y observémoslo estos días para hallar una solución a su problema.
Al día siguiente, Karenina y Jean Michel estaban en el jardín de la casa donde Elmer y sus hermanos vivían con sus padres. Vieron a Mara, una hermana de Elmer, regando las plantas; tiempo después, Elmer bajó al patio y tuvo una pequeña conversación con Mara:
-Oye Mara, ¿has visto mi látigo?
-No, Elmer, ¿por qué?
-Porque... quiero practicar para ser domador de caballos en un circo –mintió Elmer-.
-No recuerdo, pero me parece que lo dejaste encima de tu barco a escala.
-Gracias, Mara. Lo buscaré ahora mismo.
Habiendo escuchado esa plática entre Mara y Elmer, Jean Michel sospechó que el tío de Karenina iba a autoflagelarse. Ella también sintió lo mismo. Y, efectivamente, ya que Mara terminó de regar las plantas, entró a la casa y Elmer salió al patio a golpearse con su látigo. En verdad se lastimó más que Jesucristo cuando estaba siendo golpeado por Poncio Pilatos durante su arresto.
-¡Oh, no. Eso del sufrimiento por placer no es nada bueno! –comentó Karenina, asustada-.
-¡Esta cueriza no debería ser el pasatiempo favorito de Elmer! –exclamó Jean Michel, a punto de llorar.
CONTINUARÁ...
*CONALEP: Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica.
---
Ah, se me olvidaba... ZZero: sí, lo de Wendy Bustamante y su personalidad parecida a la de Dominique Perrier es más o menos como la entrevista del enlace que posteaste aquí.
Karenina y Jean Michel habían sido llevados a una ciudad llamada Navojoa, localizada al sur de la provincia mexicana de Sonora, exactamente en la escuela preparatoria donde estudiaba Elmer: el CONALEP* Navojoa. Entraron a la cafetería de esa escuela, pero no se atrevieron a pedir nada porque alterarían el curso de la historia. Observaron a Elmer comiendo pan con mermelada y tomando café americano. Pero, al terminar sus alimentos, él se fue a una esquina de la cafetería y empezó a hacerse cortes en los brazos con una navaja de afeitar, mientras ponía cara de felicidad. "¡Sí, esto me encanta!", se dijo Elmer a sí mismo. Y mientras él se hacía heridas por gusto, Karenina le dijo a Jean Michel:
-Oye Jean Michel, eso que Elmer está haciendo es muy peligroso. Podría morir demasiado pronto si sigue con eso.
-Tienes razón, Karenina. Sigámoslo sin que se dé cuenta, y observémoslo estos días para hallar una solución a su problema.
Al día siguiente, Karenina y Jean Michel estaban en el jardín de la casa donde Elmer y sus hermanos vivían con sus padres. Vieron a Mara, una hermana de Elmer, regando las plantas; tiempo después, Elmer bajó al patio y tuvo una pequeña conversación con Mara:
-Oye Mara, ¿has visto mi látigo?
-No, Elmer, ¿por qué?
-Porque... quiero practicar para ser domador de caballos en un circo –mintió Elmer-.
-No recuerdo, pero me parece que lo dejaste encima de tu barco a escala.
-Gracias, Mara. Lo buscaré ahora mismo.
Habiendo escuchado esa plática entre Mara y Elmer, Jean Michel sospechó que el tío de Karenina iba a autoflagelarse. Ella también sintió lo mismo. Y, efectivamente, ya que Mara terminó de regar las plantas, entró a la casa y Elmer salió al patio a golpearse con su látigo. En verdad se lastimó más que Jesucristo cuando estaba siendo golpeado por Poncio Pilatos durante su arresto.
-¡Oh, no. Eso del sufrimiento por placer no es nada bueno! –comentó Karenina, asustada-.
-¡Esta cueriza no debería ser el pasatiempo favorito de Elmer! –exclamó Jean Michel, a punto de llorar.
CONTINUARÁ...
*CONALEP: Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica.
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Ah, se me olvidaba... ZZero: sí, lo de Wendy Bustamante y su personalidad parecida a la de Dominique Perrier es más o menos como la entrevista del enlace que posteaste aquí.
