Gracias por reflotar el asunto, SYNTHETIC, porque de la calidad de las remasterizaciones ya hacía tiempo que se no hablabla. También por referir nuevamente a esta web, que no hay que olvidar que está hecha por aportaciones particulares. Es decir, que si yo indico que he hecho una prueba con el "Rendez-Vous" y le otorgo un rango dinámico de 20 decibélios directamente lo voy a poner en el número 1 de la lista. Aún así, confiemos en la buena fe y en el buen trabajo de quienes hacen las aportaciones.
Hay una razón que explica porqué por regla general las remasterizaciones en CD desde hace una década tienen un rango tan estrecho, y ésta es bien conocida por el nombre de "guerra de volúmenes".
Antes de nada decir que el rango dinámico es la diferencia en decibélios entre la muestra de sonido más baja de la grabación y el punto más alto de la misma. Lo que principalmente se hace en las remasterizaciones es aplicar una compresión de rengo dinámico que lo que busca es igualar ambos extremos. Por ejemplo, en "Oxygene 1" se buscaría igualar en volumen el comienzo con la secuencia con la entrada del bajo, que ahora de cabeza diría es el punto donde los graves hacen alcanzar el punto más alto. Pues al hacer ésto, igualar la grabación por medio de la compresión, el rango dinámico disminuye.
¿Cuál es el precio a pagar? Principalmente que muchos sonidos que están en una frecuencia alta, por ejemplo los armónicos, son capados en este proceso, por lo que los matices y la riqueza de la grabación se pierden. ¿La ventaja de todo esto? Que la grabación va a sonar mucho más fuerte y que algunos detalles de la misma que quedaban silenciados porque para apreciarlos había que subir el volumen del reproductor a un punto donde el ruido de fondo (propio de grabaciones realizadas originalmente con precarios medios, un ejemplo claro es "Tubular Bells") destaca demasaido y perturba la escucha.
En resumen y después de todo este rollo. ¿Entonces qué soporte y qué edición es la que aportaría mejor calidad a la escucha? Para mí, ante todo aquella que se reproduzca en un equipo de sonido medianamente bueno, eso por adelantado. Si ponemos una edición Mobile Sound Fidelity (aquellas que tanto en vinilo como en CD se grababan a la mitad de velocidad para asegurar la máxima calidad) en una cascarria de minicadena sonará a demonios. Solventado este primer precepto, la calidad del equipo, la mayoría estamos de acuerdo en que un vinilo puede ofrecer un espectro de frecuencias mayor aún que la del CD, en la que las frecuencias (de un rango sobradamente amplio como para la percepción por el oido humano) son transferidas a bits, lo cual implica una conversión que no deja de ser una "reinterpretación" en números de una vibración (loq ue es una onda sonora, un sonido, a fin de cuentas).
Sin querer entrar en polémicas, a nivel técnico un vinilo bien grabado y bien conservado siempre sonará mejor que un CD en un equipo adecuado para su reproducción.
Si me he explicado bien con todo este rollaco ahora entenderéis por qué la mayoría de las ediciones mejor valoradas son ediciones en vinilo, y las de menos valoración ediciones postreras en CD. También por qué las primeras ediciones en CD tienen un valor superior sobre las más recientes (siempre por regla general). Esto se debe a que en los 80 se hacía un máster distinto para la edición en CD, otro para el vinilo e incluso uno completamente diferente para cassette. Antes había una conciencia de que cada formato tenía sus ventajas y sus limitaciones (como en el caso de la cassette limitaciones físicas), por lo que se hacía unas masterización específica para cada soporte. Esta es la razón por la que, por ejemplo, encontramos en la primera edición francesa de "Equinoxe" en LP y cassette diferencias muy marcadas. Ambas proceden de másters diferentes.
Pero a fin de cuentas lo importante de todo esto es la experiencia del oyente. Para algunos escuchar un CD sin clics molestos y con un volumen bien alto es lo mejor. Para otros poder apreciar en todo su extensión una grabación aun teniendo que sacrificar el potenciómetro del volumen del ampli es lo ideal. Para gustos, colores.